Hace unos días, revisando un cuaderno de aquellos tiempos en los que aún iba al colegio, encontré una carta de amor redactada propia de mi redacción. Por aquel entonces, creo que ingresé a la literatura guiado por el amor que sentía por una joven compañera mía, a la que lamentablemente, nunca pude declarar mis sentimientos. Esa carta, sigue rondando aún la memoria, y algún día me atreva a hacérsela llegar (aunque se muy poco de esa niña actualmente), o quizás, sea tal mi descaro de ponerla aquí. Sólo el tiempo dirá si me atrevo.
El punto, es que encontré a esta carta, al lado de un poema de unos de mis poetas favoritos; Mario Benedetti. Quien ha leído a Benedetti, de alguna manera ha quedado prendado con su poesía y se ha vuelto parte de la literatura. Sus poemas, de carácter urbanista y quizás oficinista, a diferencia de muchos autores nuevos, evita las dosis despreciables
de amor cursi e intermitente. Los versos de Benedetti, contrastan la realidad del amor.
Por eso, como recuerdo y homenaje a ese maestro quien ya no está entre nosotros, comparto con ustedes "ese poema que me llevo a enamorarme de las letras", y que de se
guro de muchas formas ha de llegar a los que de verdad aman la poesía como yo.
HAGAMOS UN TRATO
Compañera usted sabe puede contar conmigo, no hasta dos o hasta diez sino contar conmigo si alguna vez advierte que a los ojos la miro y una veta de amor reconoce en los míos no alerte sus fusiles ni piense que deliro
a pesar de esa veta de amor desprevenido usted sabe que puede contar conmigo
pero hagamos un trato nada definitivo yo quisiera contar con usted es tan lindo saber que usted existe uno se siente vivo quiero decir contar hasta dos hasta cinco no ya para que acuda presurosa en mi auxilio
sino para saber y así quedar tranquilo que usted sabe, que puede contar conmigo